Alejandra Castillo: Una trayectoria inspiradora en el desarrollo económico de Estados Unidos

Alejandra Castillo, una destacada figura dominicana en el ámbito político de Estados Unidos, ha dejado una huella imborrable en el desarrollo económico del país desde su nombramiento como Subsecretaria de Comercio para el Desarrollo Económico en 2021. Nacida en Nueva York de padres dominicanos emigrantes, Castillo se crió en un entorno que combinaba la cultura dominicana y el sueño americano.

Su experiencia en la República Dominicana durante su adolescencia, tras el huracán David, le brindó una perspectiva única sobre la importancia de las raíces y la identidad cultural. Castillo, que se formó en economía, ciencias políticas y asuntos internacionales, encontró su pasión en la política y el servicio público.

En Washington, Castillo se destacó en un ambiente con poca representación latina, contribuyendo a importantes administraciones demócratas, incluyendo su trabajo con el senador Edward Moore Kennedy, y en la Casa Blanca durante la Administración Clinton. Su carrera la llevó a ser la primera mujer hispana en dirigir la Agencia de Desarrollo de Empresas Minoritarias y posteriormente, en 2021, a liderar la Agencia para el Desarrollo Económico, designada por el presidente Biden.

Castillo ha enfocado sus esfuerzos en asegurar que la comunidad latina esté representada en los programas de su equipo, priorizando la equidad y la inclusión de comunidades diversas. A lo largo de su carrera, ha sido una defensora de la educación y el empoderamiento de las mujeres, especialmente en posiciones de liderazgo económico.

Su labor incluye la dirección de proyectos de infraestructura y la inversión en tecnología, destacando su papel en la creación de 31 centros tecnológicos en EE.UU. y Puerto Rico. Este proyecto busca impulsar la innovación, la tecnología y preparar la mano de obra para las industrias emergentes.

Castillo valora profundamente la relación entre Estados Unidos y la República Dominicana, reconociendo la interconexión económica y cultural entre ambas naciones. Su historia es un testimonio del potencial y la contribución de la diáspora dominicana en Estados Unidos.