Brechas en la educación de Estados Unidos durante la pandemia

La educación en tiempos de Covid-19 es uno de los temas que está en la palestra en la actualidad, ya que ha sido uno de los sectores más afectados debido a los cierres masivos de casi todas las instituciones educativas en todo el mundo, esto con el fin de frenar los contagios.

18El cierre de las instituciones educativas ha traído problemas de salud mental, salud emocional y social, preocupaciones para las familias de bajos ingresos, al no poder encontrar opciones educativas presenciales y la gran brecha de desigualdad que nos ha presentado esta nueva realidad.

Muchas familias de bajos ingresos no tienen la capacidad ni los instrumentos para propiciar la educación a distancia, ya que tienen acceso limitado o no tienen acceso a computadoras, tabletas, teléfonos o internet y posiblemente dependan de los servicios que prestan las escuelas para el ámbito académico de sus hijos.

Un estudio de las universidades de Brown y Harvard evaluó a 800,000 estudiantes en el uso de Zearn un programa de enseñanza de matemáticas en línea, tanto antes como después del cierre de escuelas en marzo del año en curso; según los datos obtenidos, el progreso de los estudiantes en matemática bajó aproximadamente la mitad, con un impacto negativo más pronunciado en los vecindarios de bajos ingresos.

Estas brechas persistentes en los logros académicos que existían antes del Covid-19, como las desigualdades según los niveles de ingresos y entre las diferentes razas, pueden empeorar y ocasionar un daño grave y difícil de reparar en términos de resultados educativos de los estudiantes, principalmente los más pequeños.

Según una encuesta del Center on Reinventing Public Education de la Universidad de Washington a 477 distritos escolares, hay demasiadas escuelas que están dejando el aprendizaje a merced de lo que ocurra, lo que dificulta bastante el aprendizaje de los estudiantes según un estudio de Northwest Evaluation Association, donde muestran que los estudiantes en algunos días sin recibir docencia continua, pierden el 20% de lo aprendido durante el año escolar y un 27% de las competencias en matemáticas.[1]

Por último, pero no menos importante, el aprendizaje remoto dificulta la absorción de información para los estudiantes con discapacidades, retrasos en el desarrollo y otras discapacidades cognitivas; en particular, los estudiantes sordos o hipoacúsicos, con problemas de la vista, ciegos o con trastornos de aprendizaje y otras discapacidades mentales y físicas han tenido grandes dificultades con la educación remota.

[1] https://espanol.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/community/schools-childcare/reopening-schools.html