Judíos ortodoxos de Nueva York protestan por el cierre de negocios no esenciales

La decisión de las autoridades de Nueva York de cerrar negocios no esenciales en vecindarios con alto índices de COVID-19 ha provocado una serie de protestas en distintas partes de la ciudad, en especial en Brooklyn, donde reside la comunidad ortodoxa judía y grupos de minorías latinas.

Algunos de los vecindarios que se enfrentan a este nuevo aislamiento están dominados por judíos ortodoxos, latinos y una minoría asiática que reside en los sectores de Borough Park y Bushwick, en Brooklyn.

La comunidad judía protestó enérgicamente en contra de las nuevas medidas de cuarentena por considerarlas injustas y con tintes antisemitas.

Las medidas establecen que todo negocio que no se considere esencial debe cerrar, lo cual impacta en una manera directa a muchos quisqueyanos y a la población latina del área.

Las protestas que tomaron inicio en la comunidad judía en Brooklyn han sido la punta de lanza para abrir una nueva caja de pandora en los asuntos políticos entre el presidente Trump y el alcalde de Nueva York por el manejo que le ha estado dando a la crisis de salud. La Alcaldía alega que todo evento que incite la aglomeración de personas ayudará a que el virus se propague de una manera más rápida.

La Alcaldía asegura que se ha insistido en numerosas ocasiones a la comunidad judía que respete la ley de distanciamiento social, en especial en las sinagogas, donde en numerosas ocasiones no ha sido así, según se puede apreciar en videos que circulan en las redes.

Las nuevas medidas afectan zonas de Queens y Brooklyn, donde se ha registrado un número considerable de casos positivos. Dominicanos propietarios de salones de belleza, barberías, gimnasios o cafés se verán obligados a cerrar nuevamente sus negocios, acarreando pérdidas económicas.

Medidas como estas han enfrentado también de manera directa al gobernador estatal, Andrew Cuomo, y el alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blasio, que se opone al cierre total de todos los negocios no esenciales en las zonas afectadas.

El gobernador dijo que se puede protestar pacíficamente, pero que jamás el gobierno estatal tolerará desorden público y daños a terceros, con lo cual condenó enérgicamente las acciones de protesta de los judíos ortodoxos en Brooklyn.