Latinos serán unos de los principales beneficiados de las nuevas viviendas en Nueva York

La pandemia del COVID-19 ha intensificado toda clase de problemas que vive la sociedad contemporánea y la vivienda ha sido una de las más graves. Por esto la Senadora demócrata Kirsten Gillibrand, y la representante Yvette Clarke, han lanzado una iniciativa que busca solucionar la problemática nacional actual que existe.

Recientes estudios indican que la población latina es el grupo que más ha crecido en cuanto a las compras de propiedades se refiere y que hay un alto porcentaje interesado en comprar sus viviendas. Sin embargo, no lo han podido hacer debido a factores económicos. El 49% de la población considera que es un problema el acceso a vivienda asequible. Este informe fue publicado en un reporte hecho por el Pew Research Center.

Los demócratas están proponiendo un proyecto de ley que tiene como objetivo invertir US$15,000 millones en viviendas asequibles cada año, durante 10 años, para así lograr que muchas más personas de bajos ingresos puedan adquirir sus propios hogares.

En ciudades como Nueva York, la pandemia puso claro que resolver la crisis habitacional debe ser una prioridad para el Gobierno federal, en solo ciudades como Nueva York, más de 150,000 familias corren el riesgo de quedarse en las calles por la incapacidad de poder pagar los alquileres.

Hasta el momento este proyecto se enfoca en familias de bajos ingresos y clase media. El proyecto de Ley de Viviendas Asequibles y Equidad de Ingresos Medios del área se enfocaría en aumentar la transparencia entre los constructores, y aumentar la oferta de viviendas asequibles.

Hasta el momento se tiene contemplado que el proyecto estaría creando 350,000 nuevas unidades asequibles. Una segunda parte de la pieza de ley incluye regularizar la renta y ofrecer nuevas herramientas para aquellos que sus alquileres superen el 90% de sus ingresos.

Uno de cada cuatro inquilinos gastan más del 50% de sus ingresos en alquileres en la ciudad de Nueva York. Esto se agrava aún más por el hecho de que no hay viviendas asequibles, tomando en cuenta que esta situación sigue desplazando a las comunidades más vulnerables fuera de la ciudad.

El proyecto de ley incluye estos importantes puntos:

• Evaluar nuevos métodos para calificar a las personas con menos ingresos en la ciudad.
• Ayudar a controlar el tope máximo de alquiler en la ciudad.
• Generar un fondo de US$5,000 millones para construir viviendas exclusivamente para personas de bajos ingresos.

Designar un incentivo de US$5,000 millones para asistir a los gobiernos locales a aumentar sus programas de viviendas asequibles.