Nueva York demanda con urgencia viviendas asequibles
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Miles de personas en el estado de Nueva York se han unido a diferentes protestas en la ciudad para reclamarle a la gobernadora estatal un programa eficiente que resuelva el gran déficit de viviendas que enfrenta la ciudad en estos momentos. Todo esto luego de que dos días después, las solicitudes para el programa de alivio de alquileres (ERAP), cerrará por falta de recursos.
El escenario de la última protesta se llevó a cabo en la exclusiva zona del Hudson Yard, en Manhattan, donde cientos de inquilinos, activistas y otros importantes líderes de la ciudad decidieron lanzar la campaña conocida como “HouseNY”, que tiene como objetivo que se lance un proyecto a largo plazo para acabar con el peor cáncer que ha conocido la ciudad, como afirman sus residentes, que es la crisis de la vivienda.
Nueva York en estos momentos enfrenta un déficit de aproximadamente 130,000 viviendas sin contar con los miles más que enfrentan la posibilidad de desalojos de sus viviendas actuales. Los activistas han afirmado que, aunque ha sido un gesto noble haber creado la moratoria de vivienda, de igual forma esto no soluciona para nada la crisis ya que aquellos que no habían podido pagar US$1,200 de alquiler tampoco podrán pagar el acumulado. En algunos casos han llegado a acumular deudas de hasta US$30,000 , especialmente entre personas de escasos recursos.
El senador estatal Michael Ginaris hizo especial énfasis en que se debe de impulsar la plataforma de viviendas asequibles en el 2022, y también exigir un paquete legislativo urgente que incluya eliminar el programa 421-a, que concede importantes exenciones de impuestos a empresas constructoras como las de Hudson Yard, que se han beneficiado con más de US$6 mil millones del estado sin que hayan ofrecido un número considerable de alquileres asequibles.
Así como esta empresa, hay cientos más que construyen a pasos agigantados pero no ofrecen ni siquiera el 20% de sus proyectos a personas de bajos ingresos y a su vez se benefician del estado. Todos los residentes de esta gran ciudad merecen viviendas dignas y, para juicio de este senador, es imposible no aumentarles los impuestos a los mismos ricos que se están beneficiando del dinero de los contribuyentes para sus propios proyectos.
La plataforma de vivienda para el 2022 incluye además el programa de (TOPA), el cual fortalece la oportunidad de compra para los inquilinos y una ampliación de vivienda para los vecinos bajos la ley (HONDA), que ya fue aprobada.
Si algo debemos de entender todos es que las clases necesitadas necesitan un lugar digno donde vivir. Solo imagínense una ciudad como Nueva York si se quedara sin clase trabajadora. La clase pudiente de la ciudad no podría sostener ni la cuarta parte de las actividades estatales, afirma José Enrique Smith, residente en Brooklyn, Nueva York.