La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido que el mundo debe estar preparado para una triple amenaza en esta temporada invernal en gran parte de la tierra, debido a que los casos de COVID-19 podrían dispararse exponencialmente y, a su vez, el virus respiratorio Sinctial y la gripe estacional podrían hacer un coctel peligroso aumentando las enfermedades en el continente americano.
En estos momentos el solo hecho de un aumento significativo en las enfermedades respiratorias es motivo de preocupación, ya que está afectando a 3 de cada 10 personas y esto debería de preocuparnos como sociedad, afirmo Carissa F. Etienne, directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS). El aumento de una sola infección ya es preocupante, y si varias empiezan afectar a la población al mismo tiempo ya se convierte en una preocupación mayor, en especial en la mayoría de los países de América latina donde no se cuentan con estructuras sanitarias sólidas.
El COVID-19, el cual ha desaparecido de la palestra pública, no se ha ido y aún se mantiene vigente. De hecho hubo un aumento de un 17% en la región, con un incremento exponencial de muertes reportadas en Centroamérica y Sudamérica. Lo mismo resulta para el caso de la gripe temporal. Los incrementos han sido exponencial en el cono sur del continente, especialmente en Argentina y Uruguay, países que han visto incrementos sustanciales. Es importante estar atento a esto.
En relación con el virus conocido como VRS, aunque no existe una vacuna para esto, se puede prevenir de ciertas maneras como son el distanciamiento social.
En cuanto a la situación regional en Centroamérica, la directora de la Organización Mundial de la Salud, afirmó que el caso del cólera en Haití es algo sumamente grave y no puede pasarse por desapercibido. Hay que mitigar riesgo antes de que ocurra una propagación masiva al igual que otros virus.